La Comisión de Constitución comenzó el estudio del proyecto originado en moción, que modifica el Código Penal y el Código de Procedimiento Penal para tipificar el delito de sustracción de madera y habilitar el uso de técnicas especiales de investigación para su persecución penal (boletín 14008), que se encuentra con urgencia de discusión inmediata.
El principal autor de la moción, diputado Miguel Mellado (RN), explicó que el delito de robo de madera se concentra entre las regiones del Maule y Los Lagos, afectando a medianos y pequeños propietarios, lo que pone en riesgo la sustentabilidad económica. Agregó que las pérdidas por este crimen se han triplicado en los últimos tres años. En 2018 alcanzó los 20 millones de dólares; en 2019 aumentó a 45 millones y en 2020 ya asciende a 68 millones de dólares.
El legislador dijo que 65 mil camiones de madera han sido robados y, con la competencia desleal de aserraderos ilegales, peligran 30 o 40 empresas que dan trabajo a más de 3 mil trabajadores.
El diputado Mellado explicó que buscan equiparar este proyecto a lo que ocurre con el delito de abigeato, contemplado en la Ley 20.596, que modificó otros cuerpos legales para incluir la fiscalización y trazabilidad en el robo de animales, es decir, el objetivo es que exista más eficacia investigativa.
El parlamentario también detalló otros aspectos que se sancionan en el proyecto. Así, quien porte herramientas o utensilios empleados para la tala de árboles será castigado con presidio menor en su grado mínimo o multa de 20 a 50 UTM; y cuando la madera extraída tenga un valor que supere las cinco UTM, se aplicarán multas de 75 a 100 UTM. Además, los vehículos motorizados, las herramientas y los instrumentos utilizados en la comisión del delito caerán en comiso.
Los subsecretarios del Interior y de la Segpres, Juan Francisco Galli y Máximo Pavéz, respectivamente, señalaron que la propuesta parlamentaria cuenta con el respaldo del Ejecutivo y forma parte de la agenda de seguridad pública del Presidente Piñera.
El subsecretario Pavéz ejemplificó que el delito de abigeato se ha reducido en hasta un 50% en la región de Los Lagos, desde que se dictó la ley. Por ello, se busca que en el robo de la madera se aplique una normativa similar, revisando la trazabilidad del producto, para que se fiscalice su origen, transporte, venta y faena, desde chips hasta madera para leña; definiendo a la Conaf como organismo encargado.
Al respecto, los diputados René Saffirio (Ind) y Leonardo Soto (PS), manifestaron que no se requieren nuevos tipos penales, porque los recursos investigativos y las tácticas policiales ya están disponibles, pero no son aplicadas por los jueces.
Ambos coincidieron que el delito de robo con intimidación y violencia ya está penado con sanciones altísimas en el Código Penal, con penas de más de 5 años y un día.
En tanto, el diputado José Pérez (Ind.) manifestó su preocupación porque “no se controla nada respecto al abigeato”, pese a entregar pruebas concretas a la Fiscalía “pasan años y no pasa nada”, aseguró. En el robo de madera, recalcó que la situación es similar, “sea una camionada o 20 tampoco pasa nada”. A su juicio, se debe modificar la metodología para buscar a los responsables y ser más enérgicos. “Grandes empresas o aserraderos compran con facturas falsas”.
Finalmente, el diputado Gonzalo Fuenzalida (RN) indicó que existen 2.500 denuncias de robo de madera al año y existe incapacidad de parte del Estado y del órgano persecutor (Ministerio Público) para poder detener a las organizaciones criminales, no hay nadie detenido. Eso crea una sensación de impunidad absoluta.
En ese sentido, argumentó que es necesario tipificar el delito para luego establecer las medidas de control como en el abigeato, y acreditar bajo qué título se traslada la madera, lo que ayudará también a verificar la tala de bosque nativo.
El subsecretario del Interior, Juan Francisco Galli, llamó a discutir si es pertinente esta modificación y respondió a las críticas de establecer tipos penales para cada bien que se sustrae. Recordó que la agenda corta de Bachelet también modificó el artículo 433 del Código Penal con nuevos delitos, lo que mejora en cómo estos se persiguen y condenan.
La autoridad enfatizó que vale la pena agregar el robo de madera. “No basta el tipo penal, sino también mejorar las técnicas investigativas porque hay organización criminal, aserraderos ilegales, y con CONAF e Impuestos Internos podremos tener el ciclo completo”, sostuvo Galli.