La fiscal Claudia Zárate Rojas obtuvo una condena de 12 años de presidio efectivo para un hombre de 51 años, quien enfrentó un juicio oral por violación reiterada, abuso sexual hiperagravado y abuso sexual, delitos cometidos contra una niña cuando tenía entre 11 y 12 años, en Chillán. El condenado es el hermano de la pareja de la abuela de la víctima.
La misma niña, además, sufrió actos de significación y relevancia sexual por parte de un tío materno, un hombre de 50 años, cuando la víctima tenía entre 9 y 13 años. Por este delito de abuso sexual reiterado, el segundo condenado deberá cumplir una pena de 6 años de presido también de forma efectiva.
La niña denunció estos últimos hechos en 2019 y en el marco de la investigación, que la Fiscalía realizó con la Brigada de Delitos Sexuales de la PDI, quedaron al descubierto, además, los ultrajes cometidos por el primer condenado.