Investigadores de la carrera de Fonoaudiología de la Universidad Santo Tomás (UST), sede Viña del Mar, están realizando un inédito estudio que postula la implementación de un innovador modelo de evaluación, más preciso, económico y rápido, para la detección temprana de problemas de audición (hipoacusia) en personas mayores, utilizando principalmente dispositivos móviles, como smartphones. Esto, en contraste al Examen Médico Preventivo del Adulto Mayor (EMPAM), que es aplicado en la Atención Primaria de Salud (APS).
Aunque la investigación, que se adjudicó un Fondo Nacional de Investigación y Desarrollo en Salud (Fonis) en 2021, aún se encuentra en una fase preliminar, ya ha demostrado que el uso de mobile Health o salud móvil, a través de la aplicación uHear, es más efectiva que la actual metodología empleada en el EMPAM.
“Con el objetivo de instaurar una estrategia de tamizaje de carácter universal y precisa, se busca alcanzar la detección temprana de la hipoacusia para prevenir las consecuencias negativas que afectan en la calidad de vida”, explicó Sebastián Rivera, director del estudio e investigador de la UST, destacando que la recopilación de datos y la posibilidad de proponer ajustes en los protocolos de evaluación, beneficiaría a la totalidad de personas mayores atendidas en centros de Atención Primaria de Salud, como son los Centros de Salud Familiar (Cesfam).
De esta manera, los resultados iniciales indican que la estrategia actual empleada para la detección de enfermedades crónicas no transmisibles no sería eficaz en la identificación adecuada de patologías auditivas. Por lo tanto, “considerando el envejecimiento global y la alta prevalencia de hipoacusia en esta población, se hace necesario contar con un buen tamizaje de búsqueda activa universal de la hipoacusia, por ello establecer planes preventivos e intervención oportuna en lo que respecta a la calidad de vida de las personas mayores de nuestro país”, sostuvo el investigador UST.
En el sistema de salud público, en Chile si bien las Garantías Explícitas en Salud (GES) garantizan el uso de audífono para personas mayores de 65 años con hipoacusia, no aseguran un modelo de tamizaje auditivo universal para esta población.
La hipoacusia, o pérdida de la audición, puede acarrear diversas consecuencias en las personas mayores, quienes podrían tardar entre 9 a 10 años en solicitar asistencia profesional, ya que actualmente, en la APS existe una amplia brecha respecto al acceso para una atención fonoaudiológica oportuna, sumado a la escaza intervención que reciben en aspectos comunicativos y cognitivos.
De acuerdo con las últimas cifras, en Chile la prevalencia de la hipoacusia se estima por sobre el 65% en personas mayores de 60 años, incrementando drásticamente a aproximadamente 74% en personas mayores de 70 años.