Santiago, 2025 – El hurto en supermercados es una de las principales fuentes de pérdida para el retail en Chile. De acuerdo con el VI Estudio de Mermas en el Retail 2024, realizado por ALTO Chile, la Cámara de Comercio de Santiago (CCS) y la Escuela de Negocios de la Universidad Adolfo Ibáñez, los productos más sustraídos en supermercados incluyen desde alimentos de primera necesidad hasta artículos de ferretería y mascotas.
El informe, que analizó la merma en 13 cadenas de supermercados, farmacias y multitiendas, reveló que las categorías con mayor porcentaje de pérdidas por hurto en supermercados son:
Frescos y lácteos (5,3%): mantequilla con sal de 250 gr, queso laminado y jamón pierna artesanal.
Carnes y pescados (5,28%): lomo vetado, salmón ahumado, lomo liso y trutro entero.
Frutas y verduras (5,2%): tomate, palta Hass y champiñón.
Además, una categoría que llama la atención es la de ferretería y automóviles (4,42%), con productos como extensiones eléctricas de 10 metros, packs de dos ampolletas LED y pegamento "La Gotita" profesional. También destaca el hurto en la categoría mascotas (3,97%), donde sobresalen snacks Churu para gatos y alimento Dog Chow.
Según María de los Ángeles Kassis, Country Manager de ALTO Chile, el estudio evidencia que el hurto en supermercados no siempre está relacionado con productos de alto costo, sino con artículos de fácil reventa y alta demanda en el comercio informal.
"Es sorprendente ver cómo productos como alargadores eléctricos, ampolletas LED y pegamentos profesionales lideran la lista de los artículos más robados en supermercados. Esto indica que el hurto responde más a la facilidad de comercialización que al valor del producto en sí", explica Kassis.
Además, señala que la ubicación de estos artículos dentro del supermercado influye en su sustracción. "Muchos de estos productos están en espacios reducidos o en puntos ciegos, lo que facilita su robo. Los supermercados deben analizar sus tasas de pérdida por categoría y reforzar la seguridad en las zonas más vulnerables", agrega.
Otro factor clave es la evolución de las estrategias de los delincuentes. "A medida que ciertos productos se vuelven más difíciles de robar, los delincuentes buscan nuevos artículos con alta rotación en el mercado informal. Es un fenómeno cíclico que obliga a los supermercados a actualizar constantemente sus medidas de seguridad", enfatiza la experta.
Desde ALTO Chile, destacan que la clave para combatir este fenómeno es un enfoque integral que combine tecnología, análisis de datos y colaboración con las autoridades.
"La prevención del hurto en supermercados requiere un trabajo conjunto. En ALTO Chile, acompañamos a nuestros clientes con análisis de tendencias delictuales, implementación de estrategias de mitigación y tecnología avanzada que permite anticiparse al delito. Nuestro objetivo es crear un entorno más seguro tanto para los trabajadores como para los clientes", concluye Kassis.