En un contexto de cambios significativos para la educación pública de la región, el director ejecutivo del Slep Valle Diguillín, Claudio Guinéz, ha asegurado que el proceso de traspaso de más de 100 establecimientos educacionales no incluye ningún plan de desvinculación de trabajadores. A pesar de las preocupaciones de muchos docentes y personal administrativo, Guinéz dejó claro que no habrá despidos masivos.
En este proceso, que afectará a más de 18 mil estudiantes y un considerable número de trabajadores de la educación, se busca garantizar una transición ordenada y eficiente. Guinéz mencionó que, en esta etapa, la prioridad es el diálogo y la colaboración con los actores involucrados, como los municipios, los Daem y los mismos establecimientos educacionales, para que el traspaso se lleve a cabo de forma rigurosa y participativa.
Además, Guinéz explicó que el Slep Valle Diguillín está trabajando en la creación de mesas técnicas, las cuales estarán conformadas por equipos profesionales del Slep y los Daem. Estas mesas se encargarán de analizar los distintos aspectos relacionados con el proceso de traspaso y buscarán garantizar que se minimicen los impactos negativos sobre la educación de los estudiantes.
El director también resaltó que los profesores y asistentes de la educación seguirán trabajando dentro del sistema, ya que el objetivo del traspaso es mejorar las condiciones laborales y educativas. Según Guinéz, el proceso no está orientado a recortar personal, sino a mejorar los procesos administrativos y la calidad educativa en los establecimientos.
La reforma educativa que se está implementando en la región tiene como objetivo mejorar la calidad de la educación pública, asegurando que todos los niños y adolescentes de la región reciban una educación de calidad sin que ello implique la pérdida de empleos para los trabajadores del sistema educativo.