Un equipo multidisciplinario de profesionales, técnicos y administrativos, cercano a los 250 funcionarios, conforman el Servicio de Atención Médica de Urgencia, SAMU, presente en 12 bases o zonas de la región, atendiendo solicitudes de todo tipo, destacando un 40 por ciento por accidentes de tránsito y caídas, cifra que se mantiene bastante constante durante el año, la que forma parte de las 800 solicitudes promedio que se reciben diariamente.
Así lo indica la Jefa de Unidad de Gestión de Atención Prehospitalaria, enfermera Sofía Rodríguez, destacando que el principal objetivo del SAMU es otorgar atención prehospitalaria de urgencia a la comunidad en general, ya sea avanzada o básica, a cargo de enfermeras y/o técnicos paramédicos, junto al apoyo de los respectivos choferes.
Ante esto, toda situación que genere riesgo vital inmediato, tales como una persona que no responde y no respira, compromiso de consciencia, caídas de altura, heridas por arma blanca o de fuego, heridas con sangramiento abundante, convulsiones, entre otras situaciones, pueden ser motivo para solicitar al SAMU.
El porcentaje de atenciones puede variar según la época del año, pero además de los accidentes de tránsito y caídas, también se solicita una ambulancia SAMU por descompensaciones médicas en domicilio de diferentes causas, siendo las más frecuentes problemas cardiovasculares y de tipo neurológico. También SAMU es requerido para la constatación de fallecimiento, que si bien no es una urgencia, es un procedimiento que SAMU debe realizar si no hay otro equipo de salud cerca.
Los móviles avanzados cuentan con una cabina sanitaria equipada de forma similar a un box de reanimación de la Unidad de Emergencia de un hospital. Esto, más la capacitación de los equipos, permiten que se pueda otorgar el manejo inicial necesario para estabilizar a un paciente crítico de cualquier edad, previo a su ingreso al área intrahospitalaria.
Consultada respecto al uso diario de la línea 131, indicó que siempre hay personas que mal utilizan la línea, aunque cada vez esta cantidad va disminuyendo. SAMU constantemente participa en capacitaciones a la comunidad para fomentar el uso correcto del servicio, lo que a juicio de Sofía Rodríguez ha tenido resultados, ya que se establecieron protocolos internos para evitar que este tipo de llamadas no pertinentes mantengan mucho tiempo las líneas ocupadas.
En el área de intervención trabajan alrededor de 180 funcionarios, distribuidos entre profesionales, técnicos paramédicos y conductores, funcionarios que están a cargo de la atención directa de pacientes, conformando 18 equipos, 10 básicos y 8 avanzados. En lo que respecta al área Regulación y atención línea 131 se cuenta con un total de 38 funcionarios, integrado por médicos, profesionales y radioperadores, mientras que el equipo de Gestión y Soporte Administrativo está integrado por 13 profesionales.
Actualmente las doce bases SAMU se ubican en las comunas de Talca, Curicó, Linares, Cauquenes, Constitución, Teno, Molina, Licantén, San Javier, San Clemente, Longaví y Parral.